Todos los profesionales de la industria del tratamiento superficial están de acuerdo en que el exceso de pulverización es una pérdida de tiempo y dinero. A continuación indicamos cuatro consejos que ayudan a maximizar el recubrimiento y minimizar el desperdicio.
La boquilla es el elemento determinante en el funcionamiento y rendimiento de un equipo de chorreado abrasivo. De sus características (tipo, longitud y diámetro) depende la cantidad y la velocidad del abrasivo proyectado, así como el caudal y presión de aire necesarios.
Tan importante es conseguir el acabado superficial deseado, como conseguir un equilibrio entre los costes y la efectividad del tratamiento con chorro abrasivo.
La mayoría de los contratistas saben que una manguera de pintura atascada provoca una baja productividad y es la responsable de tener que hacer repasos.
Potentes sistemas de captación del polvo dotan a los centros de trabajo de ventilación y visibilidad óptimas durante los procesos de chorreado. Disponemos de 3 modelos de colectores de polvo portátiles tipo container: MB5000, MB10000 y MB20000.
Clemco se ha caracterizado históricamente por trabajar junto a sus clientes para diseñar y fabricar cabinas que cumplan con sus expectativas y se amolden a sus presupuestos.
Vigilar el desgaste de las boquillas de chorro y reemplazarlas con frecuencia hará que el trabajo sea más efectivo y más productivo que el de aquellos que intenten alargar su vida útil unas semanas más.
Las mangueras de chorro generalmente se desgastan cerca del acoplamiento. La presión se escapa a través de los huecos originados por un acoplamiento mal ajustado. Por lo tanto, es imprescindible que los acoplamientos queden ajustados e instalados correctamente.
Por falta de espacio y tras varias reuniones con el cliente optamos por la colocación de un portón seccional de 3000x4000, con tres hojas horizontales tipo guillotina para la entrada y salida de piezas.
El chorreado automático en cabina brinda claras ventajas para el tratamiento de grandes volúmenes de producción y asegura unos resultados precisos y repetibles. Clemco trabaja en estrecho contacto con sus clientes para diseñar soluciones a la medida de sus necesidades y coordinar en perfecta armonía los requisitos de chorreado, las especificaciones de producción y los parámetros del proceso.